Cuando hablamos de termitas, hablamos de un tipo de plaga de la madera, que en ocasiones es confundida por ejemplo con carcoma, o con hormigas, no teniendo nada que ver  ni con una ni otra, en nuestro blog en anteriores ocasiones hemos hecho referencias a las diferencias entre ellas.

Hoy queremos centrarnos en explicaros en que debemos fijarnos y que se debe tener en cuenta para detectar precozmente una plaga de termitas. Ya que cuanto antes sea detectada menores daños provocará.

En España, la especie de termitas que más se ha adaptado y cuya presencia es generalizada es la subterránea, por lo tanto su desplazamiento suele vertical desde el suelo hasta el alimento.

    Las termitas prefieren los lugares con escasa ventilación, poco iluminados y  con humedad, son hábitos perfectos para el asentamiento de colonias de termitas, generalmente faltos de mantenimiento y limpieza, es por tanto en esas zonas donde nos fijaremos primeramente, identificando los elementos susceptibles de madera, puertas, vigas, techos, tarimas, éstas últimas  localizadas en ambientes rurales o ajardinados se constituyen muy propensas por su fácil acceso desde el suelo.

En ocasiones, se pueden observar aglomeraciones terrosas pegadas a la pared o sobre voladizos que también nos pueden delatar su presencia, en realidad corresponden a túneles construídos por las obreras por los cuales se desplazan hasta el nido (termitero). También si observamos alas de insectos junto a ventanas o marcos, nos puede indicar su presencia, éstas corresponden a reproductoras aladas que salen del termitero normalmente una vez al año y se han apareado.

Otra práctica útil consiste en golpear la pared o los elementos que intuimos pueden estar afectados, si se notan huecos o se desprenden pedazos, es muy probable que hayas encontrado una colonia. Recuerda que es común no apreciar visiblemente daños en los enseres, hasta que no ejercemos una presión sobre ellos y se desmoronan partes.

Puesto que las termitas no suelen hacer huecos externos en la madera, es más difícil detectarlas que por ejemplo la carcoma.   A diferencia de la carcoma, ésta no suele dejar agujeros que delaten su presencia, de ahí que sea más difícil su detección, si bien podemos observar decoloraciones de barnices o abultamientos de la madera que en casos muy avanzados pueden hundirse con el dedo.

Como ves, sabiendo donde poner el “ojo” previamente podemos adelantarnos a los desperfectos ocasionados por ésta voraz plaga de la madera.

En caso,  de que observes o tengas indicios de problemas con termitas, u otra plaga de la madera, te recomendamos que contactes con empresas especializadas como QUIPONS, te asesoraremos y propondremos la mejor solución para tu caso.

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